El numero 78 de la cama, el sofa de soslayo,
intenta entrar una minuscula luz,
solo un atisbo dentro de una emulsion de te y de agua,
olor a muerte, perfume de flores marchitas,
la calle de sephia arde delante
y los besos humedos se sienten abiertos,
(tan...) tanto..
que se ven obligados a tragarse el desden y las lagrimas.
Como a una estacion a la que se debe llegar de prisa,
como un sueño asistido...a punto de parir y a punto de devorarse
el numero 78 es una sutura a la espera de un Obituario
un retrato que mira atraves de cada ventana
cuan identico el frenesi de las hojas por caer
y cuan cinico el ondulado trepidar de las llamas.
Inconsolable y cruento
la muerte hace heder el amor
y hace del amor un hedor tragico
De cara a la ventana
la calle pasa de prisa en su invento de flores marchitas
en su olor amargo de trepidar y de llamas
tibio reflejo luz sephia
dos dedos dentro del te
una sed sin sed
una mirada sin alma.
el sofa de soslayo
y el numero 78 rendido al pie de la cama.
viernes, diciembre 14, 2007
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